domingo, 12 de septiembre de 2010

España se "vengó" de los jugadores argentinos

Tras haber apabullado a la selección campeona del mundo en un amistoso disputado en la semana, las figuras del conjunto sudamericano que se desempeñan en la Liga española tuvieron una jornada para el olvido. Lesiones, arcos cerrados y un debut frustrado

Los futbolistas argentinos llamados a jugar con su selección durante esta semana llegaban a la segunda fecha de la Liga de las Estrellas envalentonados por el triunfo por 4-1 obtenido ante los campeones en un partido amistoso en Buenos Aires.

Sin embargo, en la jornada del sábado sufrieron un duro revés en su regreso a tierras españolas.

Los argentinos del Barcelona Javier Mascherano y Lionel Messi fueron víctimas del sorpresivo batacazo del Hércules, que se impuso al bicampeón por 2-0.

Tras haberse destacado en la victoria sobre España, Messi mostró un juego muy distante del que generalmente tiene cuando brilla en cada partido del Barcelona.

Pero peor fue la experiencia de Mascherano, que debutaba con la camiseta azulgrana. Si bien estuvo fino en la distribución de la pelota, quedó demasiado lejos de la construcción de juego y se mostró errático al intentar recuperar el balón.

Fue amonestado a los 19 minutos por cortar un contraataque y seis minutos más tarde cometió una falta similar a que podía haber supuesto su expulsión.

Finalmente, el entrenador Josep Guardiola decidió reemplazarlo en el descanso por Xavi Hernández.

Pese a la victoria del Real Madrid por 1-0 contra el Osasuna, Gonzalo el "Pipa" Higuaín quedó contrariado con el arco. El delantero desperdició al menos seis ocasiones netas de gol.

Ever Banega (Valencia) y Sergio Agüero (Atlético Madrid) protagonizaron el parte médico de la fecha y ambos se retiraron de sus partidos lesionados.

El mediocampista sufrió un esguince en el tobillo izquierdo y debió abandonar el partido que disputaba ante el Racing de Santander a los 22 minutos.

A su vez, el "Kun" formó parte de la jugada del primer gol del Atlético contra el Athletic de Bilbao, pero abandonó la cancha en camilla y en medio de lágrimas, al sufrir un esguince de ligamento lateral en su rodilla izquierda.

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