Robinson Canó es el nuevo monarca del festival de jonrones, luego de vencer a Adrián González en una emocionante final, disputada en el Chase Field de Arizona.
El segunda base de los Yanquis de Nueva York, contra todo pronóstico, pues se trataba de su primera participación en el Derby de cuadrangualres, conectó 12 en la final y totalizó 32, uno más de los conectados por el primera base de los Medias Rojas de Boston, quien disparó 11 bambinazos en la ronda decisiva.
Canó eligió a su padre, José Canó (ex lanzador de Grandes Ligas) para que fuese su pitcher en la exhibición de poder. De esta forma, por cuarto año consecutivo, el rey de los jonrones es un toletero zurdo.
Por su parte, David Ortiz y Prince Fielder, grandes favoritos, se quedaron en la segunda ronda, luego de que ambos totalizaran 13 cuadrangulares.
Ortiz, también de Boston, se quedó con las ganas de revalidar el título conseguido el año pasado en Anaheim.
El máximo jonronero de las Grandes Ligas, José Bautista, no pudo demostrar todo su poder y se quedó en la primero ronda, luego de sacar la bola en cuatro ocasiones. Al igual que Batista, Matt Holliday, Rickie Weeks y Matt Kemp abandonaron temprano la competición.
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